miércoles, 26 de mayo de 2010

La Carmelita navegó por el Calle-Calle. Mayo 2010


La imagen de la Virgen del Carmen Misionera, la Madre del Consuelo, navegó por el Calle-Calle, en la ciudad de Valdivia, observando la peregrinación
de sus hijos e hijas que la escolataban por la Costanera, en dirección al Templo Catedral.


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Más de un millar de personas se congregó en la Parroquia Sagrado Corazón de Jesús, este martes 25 de mayo, para dar la bienvenida a la imagen de la Virgen del Carmen junto al Evangelio de Chile, que llegaron a la Capital de Los Ríos, Valdivia, proveniente de la Parroquia san José, en La Unión.

Cantos y oraciones marcados por la gratitud a Dios que regala a su pueblo a su Hijo, escogiendo para ello el seno de una mujer, María de Nazaret, en cuyo vientre creció el Salvador, Jesucristo - Camino, Verdad y Vida para el mundo- fueron la tónica de la bienvenida que estuvo a cargo de la Comunidad parroquial de Sagrado Corazón junto a su párroco el P. Fernando Provoste.

Cuando el reloj marcaba las 18:35 hrs., la imagen de la Virgen se dispuso a recorrer las calles de Valdivia, acompañada de sus hijos e hijas valdivianos. Pañuelos al aire, globos, pancartas y algunas antorchas, eran signo de la bienvenida.

La imagen recorrió tres cuadras junto a los peregrinos, luego la Carmelita se dirigió hasta el Muelle del Club de Remeros Centenario donde abordó la patrullera de la Armada acompañada del pastor de la Iglesia peregrina en Valdivia, Mons. Ignacio Ducasse. A la par, los fieles convocados a este lado de la Costanera, le rendían un esquinazo folclórico a cargo del Colegio María Auxiliadora. A la Madre de Jesús agradecieron su delicadeza de Madre, al abordar una lancha y realizar el tradicional tour fluvial por el Calle-Calle intercediendo ante su Hijo para que bendiga al pueblo valdiviano.

A la llegada al Muelle Schuster, la esperaban los peregrinos que siguieron desde la Costanera su navegación por el Calle-Calle y se dirigieron al Templo Catedral cruzando el Paseo Libertad. Ad portas del templo catedralicio la esperaba la cortina de agua a cargo del Cuerpo de Bomberos, tradicional bienvenida a personas ilustres que llegan a la ciudad.

Una vez en el interior, los fieles presididos por Mons. Ignacio Ducasse, Obispo de Valdivia y el P. Tibaldo Zolezzi, Vicario Pastoral y coordinador de la visita, el Decano de san Antonio Abad, P. Mario san Martín, entre otros sacerdotes, vivieron un momento de Oración, iluminado por el Evangelio de Chile, Jesucristo Palabra viva para su pueblo reunido para acoger a su Madre.

"Nos reunimos en esta celebración tan original o sin presentes en nuestra historia diocesana. La Virgen María nos ha entregado a su Hijo, hecho Palabra. Hoy hemos recibido esta imagen que también nos entrega a su Hijo hecho evangelio, vida y esperanza para Chile; Jesucristo que en el evangelio que hemos escuchado nos entrega a su madre como madre nuestra", precisó Mons. Ignacio en la homilía.

"Jesús le dice a su madre 'Mujer, ahí tienes a tu hijo'; podemos agregar nosotros 'Mujer, ahí tienes a tu Iglesia'. Y nosotros hoy aquí acogemos este regalo que el Señor nos da, hacernos hijos de María para poder vivir como auténticos discípulos misioneros del Señor Jesús, para que con ella como madre podamos sentir el latir del corazón de su hijo en nosotros y así ser verdaderos cristianos", subrayó.

Tras la liturgia, los fieles se acercaron a saludar a la Madre y visiblemente emocionados, agradecieron su visita. Los miembros de la Comunidad parroquial de Nuestra Señor del Tránsito, de la Bahía de Corral, acompañados de las Religiosas de la Sagrada Familia de Spoleto, también navegaron hasta Valdivia para acoger a la Madre del Consuelo. "Le damos gracias al Señor por estar aquí y por la visita de la Madre entre nosotros, sin duda nos ha de traer muchas bendiciones a sus hijos e hijas", dijo Gladys Oyarzún.

"Tener en Valdivia a la Virgen del Carmen regalada por el Papa Benedicto XVI es un signo de comunión eclesial y de esperanza muy fuerte para nosotros", dijo Margarita Sánchez. "Yo estoy muy contenta porque del colegio me invitaron a venir a recibir a la mamá de Jesús, dijo Estefanía.

Así, uno a uno los peregrinos se darán un tiempo para saludar y compartir un momento de comunión eclesial junto a la Madre de Jesús y al Evangelio de Chile que llegan a Valdivia para vivir junto a todo el pueblo cristiano ¡un nuevo Pentecostés!

Fuente: Comunicaciones Valdivia